Imagine poder bañarse durante todo el año en agua templada. O simplemente alargar su verano y disfrutar de su piscina desde la primavera hasta el otoño, sin un solo escalofrío al entrar en el agua...
Pues ahora es posible y ya no es un lujo reservado a los más afortunados. A partir de ahora, cualquiera podrá calentar su piscina en función de sus necesidades y de sus medios.
Lo primero, una cubierta para la piscina
Para calentar su piscina y mantener el calor de forma duradera, primero tiene que instalar un sistema de cubierta, ya que al aire libre el agua se enfría más rápido, se evapora y queda expuesta a los rayos UV que destruyen el cloro. Una lona es un sistema sencillo y eficiente con el que podrá ahorrar energía y productos de tratamiento.
Existen distintos tipos de cubiertas: una simple lona resulta muy eficaz. Determinados modelos, como las mantas térmicas, calientan el agua de la piscina algunos grados: una solución económica pero poco eficaz.
En ese sentido, las cubiertas elevadas para piscinas también son un medio para calentar el agua y mantener una temperatura elevada gracias al efecto invernadero. Prácticas, sí, pero ¿estéticas? No está tan claro...
Las soluciones alternativas: la calefacción solar o eléctrica
Las calefacciones solares para piscinas son relativamente económicas, pero requieren espacio para instalar los colectores solares y solo son eficaces en los lugares donde hay muchas horas de sol. Es decir, en los lugares donde no siempre es necesario calentar el agua de la piscina.
El calentador eléctrico es otra solución para calentar la piscina de manera sencilla, y se instala en la red de filtración. Pero cuidado: como cualquier aparato eléctrico de calefacción, consume mucha energía y puede darle una desagradable sorpresa en la factura de fin de mes.
En definitiva, estas soluciones tienen sus ventajas, pero también claros inconvenientes que deben tenerse en cuenta. Afortunadamente, hay otra solución que, con diferencia, es la mejor.
La bomba de calor: la mejor solución para calentar su piscina
La bomba de calor (BDC) es la manera más inteligente de calentar su piscina. Aunque su instalación requiere una cierta inversión, a medio plazo es la manera más rentable y eficiente de calentar su piscina. Esta instalación es, efectivamente, la que más calor proporciona en comparación con la energía que consume, ya que utiliza el calor del aire exterior para calentar el agua de su piscina. Igual que las bombas de calor de las casas.
Además, si es reversible, dispondrá de una descongelación automática mucho más eficaz para calentar el agua de su piscina antes y después del verano, incluso con temperaturas muy bajas. En caso de ola de calor, también puede enfriar el agua, lo que aumenta la vida útil de sus equipamientos (sobre todo, del revestimiento de la piscina). Por último, si se equipa con la tecnología Full Inverter, que le permite variar su potencia, la BDC es incluso más eficiente ya que aporta la cantidad justa de calor en el momento adecuado, convirtiéndose en la más silenciosa para esos momentos en los que quiere relajarse al borde de su piscina.
Como habrá visto, la bomba de calor es la mejor solución para calentar su piscina, alargar su verano y bañarse durante todo el año de la manera más eficiente y económica posible.
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